HUMANIZAR
LA SOCIEDAD
Deshumanización social actual
El Sistema
SocioEconómicoCultural imperante en esta Civilización Occidental, si bien
satisface múltiples necesidades humanas como nunca antes en la historia de la
Humanidad, es, sin embargo, brutalmente deshumanizador y depredador y conduce hoy a la Humanidad al desastre
humano-ecológico planetario.
Esta falta de
Humanización se debe básicamente a que se han entronizado cultural y
profundamente en el Inconsciente Colectivo de la Sociedad ciertas Hipótesis,
Cosmovisiones y Creencias Existenciales de orden metafísico fuertemente materialistas,
hedonistas y nihilistas, francamente deshumanizadoras y sin compromiso alguno
con el Hombre y el Planeta.
Para estas dañinas
Hipótesis Existenciales la vida del Hombre no tiene mayor sentido ni
significación que la búsqueda del poder y el placer personal a ultranza y a
cualquier costo, principalmente a través de un enorme consumo irresponsable y
depredador. Y para lograr esto el maximizar la riqueza a como de lugar es lo
más importante y necesario y así estas dañinas Creencias Existenciales vacían
la Vida del Individuo de toda nobleza, dignidad y trascendencia, fomentando y
favoreciendo un Egoísmo superlativo y perverso, un profundo menosprecio por el
Trabajo y el cumplimiento del Deber, promoviendo
el abuso descarnado del Otro y una explotación humano-planetaria sin límites, todo
lo cual conduce hoy a la Humanidad al desastre planetario.
Este nefasto Materialismo es difundido y fomentado principalmente por el
Neoliberalismo, una perversa ideología mercantilista que hoy impera y domina socialmente
sin contrapeso y a nivel mundial, principalmente actuando a través de la
Economía y el Mercado.
Las Instituciones
sociales tradicionales, Iglesia y Familia, encargadas históricamente de proponer y sostener Cosmovisiones y
Creencias Existenciales humanistas, de valores y principios
humanizadores, comunitaristas y ecológicos, hoy se encuentran en grave crisis.
Las Creencias Existenciales de orden metafísico son lejos las más
influyentes en la actitud y conducta social del Ser Humano.
Las Iglesias, en
general, por quedarse ancladas en un pasado medioeval y la Familia por hallarse
en franca descomposición, con padre y madre comprometidos principalmente en
satisfacer un consumo familiar desquiciado y depredador.
En la Edad Media el Planeta Tierra era concebido al Centro de un
Universo estático que giraba en torno suyo: Hoy es un Planeta en evolución (“Vivo”),
al borde de un Universo en expansión permanente.
Dios, por su parte, era concebido como Creador de un Mundo estático y
ajeno, del cual era único y total responsable, viviendo en un Cielo con los suyos, con un
Infierno para sus enemigos que eran aquellos que no cumplían con sus órdenes
transmitidas por ciertos representantes divinos : Hoy aún se mantiene casi
inalterable esta añeja concepción religiosa (¡¿?!)
Para luchar con
posibilidades de éxito contra esta ominosa
deshumanización imperante, es fundamental encontrar la forma de mostrar creíble y convincentemente al Hombre Moderno Hipótesis,
Respuestas Existenciales, Cosmovisiones o Creencias Metafísicas que muestren los
eternos principios y valores genuinamente
humanos, comunitarios (y
ecológicos, hoy siglo XXI)
que claramente benefician al Individuo y a su Comunidad y que promueven un
auténtico avance (evolución) de la Humanidad; principios y valores hoy
distorsionados y pervertidos por el actual Materialismo de esta Civilización.
¿ Sin embargo, será
posible encontrar y plantear hoy creíble y convincentemente nuevas creencias
metafísicas, hipótesis o cosmovisiones existenciales auténticamente humanizadoras
y ecológicas, aceptables, plausibles, razonables para el Hombre siglo XXI pero, al mismo tiempo, eficaces para luchar contra la deshumanización, cambiando
masivamente las actitudes y la conducta social dirigiéndolas hacia la “construcción” de una Sociedad justa, fraterna
y solidaria, profundamente respetuosa de
los derechos de todo Ser Humano y comprometida con un Medio Ambiente saludable ?.
Es fundamental
que estas eventuales Hipótesis o Cosmovisiones puedan ser reconocidas fácil y
rápidamente como creíbles, plausibles, viables, por el incrédulo Hombre siglo
XXI, para que las acepte racional y emocionalmente, única forma de que puedan
incorporarse plenamente a su Siquis, profundamente en su Subconsciente e Inconsciente
personal, para luego incorporarse exitosamente al Inconsciente Colectivo Social,
desplazando a las actuales deshumanizadoras Creencias materialistas.
GAIA : Un Planeta Tierra “Vivo”
Gracias a la
Ciencia la Humanidad ha alcanzado hoy el poder para destruir el Planeta, pero
también para convertirlo en el Hábitat privilegiado de la Gran Familia Humana.
La Ciencia ha sido uno de los inventos
culturales más trascendentes en la Historia del Hombre. Con ella la Humanidad
intenta cumplir con el principal mandato vital planetario : Todo ser vivo debe
crecer siempre al máximo de sus capacidades y potencialidades, buscando, muchas
veces en base a ensayo y error - una de las técnicas evolutivas de la
Naturaleza, de la Vida - un delicado equilibrio existencial con su Entorno.
¿ Cuál debiera ser la población humana planetaria óptima ?
La Ciencia sólo se apoya en la Razón y su herramienta
la Lógica y con estos medios intenta conocer la Realidad y penetrar dificultosamente
en el Misterio Existencial Humano tratando de
participar en la “construcción” del Futuro.
La Razón aún cuando no puede entregar certeza alguna al Ser Humano es
una muy buena guía en su aventura existencial.
La Ciencia Moderna gracias a sus asombrosos
descubrimientos recientes respecto a la Realidad, al Hombre y al Planeta, tanto
desde lo aparentemente inanimado (del Macrocosmos: Astronomía, al Microcosmos: Física Cuántica), como desde los
seres vivos (Evolución Planetaria,
Genoma Humano, etc.), puede ofrecer hoy una
hermosa Cosmovisión humano-planetaria susceptible de ser reconocida,
aceptada y apoyada plenamente por el Hombre siglo XXI, incrédulo, escéptico,
pero de fría racionalidad científica.
La Ciencia
Moderna puede sostener sólida y convincentemente como Hipótesis existencial humano-planetaria a GAIA, es decir, que:
“El Planeta Tierra es un “Ser Vivo” que crece y se desarrolla a su ritmo
y medida donde el Ser Humano juega un
rol evolutivo planetario vanguardista y fundamental.”
GAIA es una existencialmente
muy significativa Imagen Terráquea, una Cosmovisión científica de la Realidad
humano-planetaria que puede constituirse
en un poderoso Símbolo humanizador,
comunitarista y ecológico que conlleva un profundo compromiso emocional con el
Hombre y el Planeta y que compendia y confirma fielmente las sabias y
milenarias Hipótesis y Creencias Existenciales
de la Filosofía Perenne de la Humanidad que
muestran diáfanamente los valores y principios auténticamente humanizadores y
socialistas.
A través de esta
Cosmovisión el Hombre moderno podrá plantearse responsable y racionalmente un
Sentido para su vida pleno de hondo significado, asertivo y muy constructivo.
Puede sostener una razonable y
constructiva Fe en el porvenir del
Hombre, de la Humanidad y del Planeta y una sólida Esperanza de que el
Mañana pueda llegar a ser mejor para él
y para la Humanidad, gracias a su propia acción personal, a su trabajo y
esfuerzo de hoy.
La Fe es, en esencia, un acto de la Voluntad, una apuesta del individuo
consigo mismo, respecto a la eventual existencia de cierta Realidad actual o
futura y es fundamental para que el Hombre
pueda cumplir con su tarea constructiva básica : Construir el Mañana, tanto en
Sí Mismo como en el Planeta.
El acto de Fe una vez internalizado en la Siquis del Individuo se transforma
en Creencia y adquiere potencia emocional y gran capacidad constructiva.
(El Hombre sólo puede “crear” lo que puede “ creer”).
Y
fácilmente podrá también observar a través de GAIA la plena igualdad humana de
origen y destino, la dignidad e importancia de cada Ser Humano, la
trascendencia y significancia del Otro - desde esta perspectiva existencial un sujeto
verdaderamente digno de Amor.
Y también podrá reconocer la plena vigencia de los siempre revolucionarios
principios humanistas: Libertad, Igualdad y Fraternidad.
“Ama al PróXimo como a ti
mismo”, este esencial mandamiento cristiano alcanza plena comprensión desde
esta mirada cosmoplanetaria. ¡¡ Claro, un “hijo de Dios” es absolutamente digno
del Amor ¡!!. Y también un Hijo de la
Tierra ¡!!!
También podrá comprender la
enorme importancia de la Comunidad sin la cual el Animal Humano no puede ni
siquiera iniciar su personal proceso de Humanización para alcanzar su madurez y
plenitud como Hombre.
Y podrá
reconocer y aceptar su plena responsabilidad personal en su aporte a este
cósmico proceso de “construcción
planetaria”, reconociendo también, por lo tanto, la importancia y trascendencia del Trabajo y
del fiel cumplimiento del Deber.
Comprenderá
que para colaborar con éxito en el
crecimiento y desarrollo de la Tierra necesita imperiosamente organizarse con el
Otro, formando eficaces equipos de
trabajo, y reconocerá
fácilmente el importantísimo rol de la Humanidad organizada como
“co-constructor” del Planeta.
La Vida crece y se desarrolla en base a exitosas organizaciones y
reorganizaciones : Es una “Organización de organizaciones” siempre crecientes
en número y complejidad.
Desde
esta óptica cada Hombre es literalmente un Hijo de GAIA y la Humanidad puede comprenderse
como una gran organización, un gigantesco equipo humano planetario construyendo
día a día el Planeta del Futuro.
El Hombre Siglo
XXI puede observar hoy que todo está “en construcción” : Cada Ser Humano en
permanente “autoconstrucción” personal, “construyendo el Amor” en su Siquis; la
Humanidad “construyéndose a Sí Misma” y,
al mismo tiempo, “co-construyendo” el Planeta el cual “crece y se desarrolla” (“se
autoconstruye”):
Incluso el Universo entero también estaría “en plena construcción”, “en
crecimiento y desarrollo”, en expansión permanente…..
De igual manera,
a través de GAIA, el enorme valor planetario de la Vida en todas sus formas y
manifestaciones será también plenamente observado, reconocido y aceptado por el Hombre moderno, concibiéndola como el
parámetro moral y ético por excelencia en este siglo XXI, y aceptando
un profundo y decidido compromiso ecológico y su clara responsabilidad
personal en el desarrollo sustentable del Planeta.
Ley Moral y Ética siglo XXI : Bueno es todo lo que beneficie a la Vida y
malo todo aquello que la perjudique.
Y respecto al
trascendente fenómeno de la Muerte, la angustia existencial humana por
antonomasia, origen primario de las tan influyentes creencias existenciales de
orden metafísico, ¿ podrá ser entendida desde esta perspectiva existencial
planetaria como simple desaparición y
pérdida total de vida dentro de esta
semilla cósmica terráquea, un sistema en pleno crecimiento y desarrollo con
cada vez más vida presente y donde nada parece perderse sino sólo transformarse
?
¿ No será la Muerte observada al interior de
este proceso de vida planetaria, sólo un fenómeno parte de un sempiterno
proceso de cambio y reconversión permanente en un Planeta donde nada se pierde
y que crece hacia su plena maduración cósmica ?. Si así fuese, ¿no adquiere
mayor valor y sentido la presente vida humana como base ontológica y
continuidad karmática para toda eventual vida
futura, cualquiera forma o característica que ésta adoptase ?
La Intuición de la Especie Humana ha supuesto desde siempre cierta forma
de vida después de la Muerte e históricamente diversas Iglesias e instituciones
han manipulado esta Intuición para controlar y dominar a sus Pueblos.
Esta forma de
entender la evolución de la Vida de la Tierra, ¿ no permite suponer también un
eventual interés específico de la Vida por cada una de sus creaturas
(especialmente por el Hombre), las cuales deben lograr el pleno desarrollo de
sus capacidades y potencialidades para que Ella alcance también su plenitud ?
Esta idea parece estar presente en el conocido ¿¡Mito!? de la Divina
Providencia.
¡!¿Y cuán coherente y consistente es con la fundamental concepción religiosa primaria,
originaria, medular y revolucionaria del Cristianismo : Un Dios inmanente,
presente en todo lugar, que conoce y ama a cada Ser Humano ?¡!
(Tal vez ésta sea hoy para el Hombre actual la única idea religiosa cristiana
verdaderamente importante y necesaria)
Esta comprensión
de GAIA le permitirá al Hombre sostener, en medio de la incertidumbre y
amenazas actuales, un fuerte y constructivo optimismo y una enorme Fe y
Esperanza en su Futuro y en el del Hombre y la Humanidad.
Claro, la Vida conocida en el Planeta se inició hace más de tres mil
millones de años y continúa cada vez más fuerte y poderosa…y la Especie Humana en
su aún breve existencia terráquea, ha podido sobrevivir exitosamente a enormes
desafíos y crudas pruebas existenciales.
Este Optimismo y
Fe son más necesarios que nunca hoy para
trabajar comprometida y eficazmente en la “construcción” de una Sociedad más
humanizada, realmente comprometida con todo Ser Humano y su Medioambiente,
alejando las graves y ominosas amenazas de este deshumanizado Materialismo al Futuro del Planeta.
No cabe duda del enorme y saludable aporte de GAIA para un planteamiento
moderno, sólido y racional de la muchas veces semiconsciente, contradictoria y arbitraria , incluso antojadiza, pero
ineludible Teoría Existencial Personal que indefectiblemente tiene internalizada
como Creencias profundas todo Individuo y que rige su vida social.
Campaña humanizadora social masiva
Pero para lograr
estos objetivos este poderoso y muy significativo Símbolo Planetario deberá ser
debidamente internalizado socialmente incorporándose profundamente al
Inconsciente Colectivo social, desde el cual espontáneamente inducirá en todo
Individuo fuertes emociones de profundo
compromiso con el Otro, con su Comunidad, con la Humanidad y el Planeta, que
promoverán en él actitudes y conductas auténticamente humanizadoras,
socialistas y ecológicas, que humanizarán esta Sociedad.
Es urgente y muy
necesario universalizar la difusión de
GAIA, especialmente entre niños y jóvenes, para asegurar una pronta
incorporación de esta Imagen Terráquea, con las valiosas Cosmovisiones humanizadoras asociadas, en la Siquis de las Personas (Educación
Síquica), para que luego pueda incorporarse exitosamente en
el Inconsciente Colectivo
de la Sociedad en un “breve plazo social”.
Esta socialización
masiva de GAIA resultaría hoy relativamente fácil de lograr, pues se cuenta con el enorme poder de las técnicas y
medios comunicacionales y publicitarios actuales, del cual se hace uso y abuso
para alimentar un enorme y muy dañino Egoísmo y promover un perverso y
depredador consumo excesivo e
irresponsable.
¿Cuál será la “masa síquica crítica” necesaria
para difundir una nueva Cosmovisión en toda la Siquis Social, en todo el
Inconsciente Colectivo?
Esta “internalización síquica social” de nuevas Cosmovisiones y
Creencias humanizadoras y constructivas utilizando el Símbolo GAIA, producirá
un profundo cambio Cultural, un revolucionario
cambio de Mentalidad social, que conllevará a una auténtica Revolución Social humanizadora
en toda la vida social, transformando esta Sociedad en una verdaderamente
justa, fraterna y solidaria, profundamente respetuosa de los derechos de todo
Ser Humano y fuertemente comprometida
con su Medioambiente.
Todo Individuo debiera comprometerse hoy y … ¡¡ YA ¡!, con esta Campaña
difusora de GAIA desde su personal nicho existencial. Así podrá entregar, desde
ya, un significativo aporte a un mejor Futuro para él, para la Humanidad y el Planeta.
Un hombre de
la calle
No hay comentarios:
Publicar un comentario