REVOLUCIÓN ECOLÓGICA ANTINEOLIBERAL
Religión y Ciencia
Históricamente la Religión y la Ciencia han sido los
principales referentes culturales a través de los cuales el Hombre ha intentado
aproximarse a la elusiva y enigmática Realidad y anticipar el Futuro.
La Religión nació como una Respuesta, Explicación o
Creencia metafísica (Dogma) para calmar
la Angustía que experimentó el Animal
Humano frente al Misterio de su Existencia cuando tomó consciencia del fenómeno
de la Muerte.
Toda Creencia metafísica
condiciona fuertemente la conducta humana : El Hombre “crea lo que cree”.
La Ciencia nació para dar una respuesta o explicación
física (Teoría) a la angustia humana frente a la problemática
material de su Sobrevivencia Existencial.
La Teoría es una construcción intelectual de orden científico
en el campo físico y es considerada sólo una suposición de existencia de cierta
Realidad y, por lo tanto, está en constante revisión.
El Dogma, en cambio, es una construcción intelectual de orden
religioso en el campo metafísico y es considerada como Verdad absoluta sin tolerar duda alguna.
La Religión para construir sus Dogmas se guía por la Intuición y usa la Emoción. En
cambio la Ciencia para construir sus Teorías se guía por la Razón y usa la
Lógica.
Históricamente las diferentes Iglesias, instituciones
religiosas que monopolizaron ciertos dogmas, dieron origen, conformaron y
dominaron sin contrapeso alguno en sus respectivas Civilizaciones
gobernando a sus Pueblos.
Civilización Occidental : Iglesias Cristianas (Católica en especial)
Hoy, sin embargo, el Hombre Moderno culto y con
mentalidad científica es capaz de y debe darse sus propias y personales respuestas
y explicaciones existenciales, planteándose una Teoría Existencial Personal
propia, independiente, que sustente sus ineludibles, insoslayables, creencias
metafísicas, pero sujeta a revisión periódica para su mejoramiento permanente.
El Animal Humano,
hoy como ayer, requiere obligadamente asomarse al Misterio Existencial, de una
u otra forma, y la Teoría Personal que elabore al respecto será muy importante
para su proceso de humanización, para su aporte a la Comunidad y para su
calidad de vida,
El Hombre tiene la necesidad
síquica de resolver su personal Puzzle
Existencial. El Ateísmo y el
Agnosticismo también son Respuestas legítimas y válidas al Misterio, pero exigen un mayor compromiso existencial.
A fin de cuentas toda Respuesta, Explicación, Creencia,
Dogma, Teoría, de orden Existencial, no es nada más que la muy particular y
personal Interpretación de la “Realidad”
que acepta o se elabora para Sí Mismo el
Individuo y que través de la cual, una
vez internalizada en su Siquis, experimenta, “siente”, “vive” su Mundo
Personal con el cual participa en la “construcción” del Mundo Social.
La Civilización Occidental
La Civilización Occidental ha
sido conformada y moldeada por la Religión cristiana y, con el decisivo aporte
de la Ciencia, ofrece hoy al Ser Humano enormes ventajas materiales,
comodidades y seguridades como nunca antes tuvo en la Historia, pero, paradójicamente,
está también amenazando la sobrevivencia misma de la Humanidad.
La principal razón de esta
paradoja se encuentra en el hecho que la cosmovisión y paradigmas cristianos
con sus dogmas metafísicos, principios y valores humanistas y
comunitarios, están siendo reemplazados
socialmente por una cosmovisión con paradigmas tremendamente deshumanizadores y
depredadores planetarios, promovida por el actual Sistema
SocioEconómicoCultural dominante, el Neoliberalismo.
Para el Neoliberalismo el
sentido de la vida del Hombre es buscar el placer y el beneficio propio a
ultranza y a cualquier costo (…para el Otro o para el Medioambiente) :
Su verdadero
Dios es el Dinero.
Esta
perversa Cosmovisión está hoy profundamente entronizada en el Inconsciente
Colectivo de la Sociedad (Siquis Social) y promueve un feroz y depredador
Egoísmo que abusa del Otro y del Medioambiente, traicionando las fraternas raíces genéticas del gregario
Animal Humano, y amenazando ominosos colapsos
socioplanetarios.
Este trágico reemplazo se ha
producido, por una parte, porque la
cosmovisión cristiana, ayer culturalmente
dominante, quedó anclada en la Edad Media y ya no es creíble ni
aceptable para el Hombre Moderno siglo XXI y además que, por su gran atraso cultural, esta anacrónica
cosmovisión religiosa está deteniendo el natural avance del proceso humanizador
del Ser Humano y de la Sociedad.
Paradoja siglo XXI Ciencia-Religión:
Ciencia : En el siglo XV el
planeta Tierra se creía plano, centro de un Universo estático y finito que
giraba a su alrededor. Hoy se cree que es redondo y que gira dentro de un
Universo infinito y en expansión….{ ¡¡ dramáticamente distinto ¡! }
Religión : En el siglo XV se
creía que había un Dios Creador que estaba en un Cielo y había un Infierno para
los que no cumplían sus órdenes, las cuales sólo eran conocidas por un grupo de
individuos a los cuales había que obedecer.
Hoy….¡¡ Es exactamente lo mismo ¡!!
{ ¿¿!¡?? }
Este bajo nivel de
humanización social ha favorecido enormemente el actual triunfo de la dañina
cosmovisión neoliberal con sus perversas creencias existenciales.
Sin embargo, hoy, los nuevos y sorprendentes
descubrimientos y conocimientos científicos siglo XXI pueden ser de inestimable
ayuda para que el Hombre
Moderno pueda luchar
culturalmente con buenas probabilidades de éxito contra las deshumanizadoras cosmovisiones y paradigmas
Neoliberales.
Cosmovisión científica S. XXI
La Ciencia moderna
ha descubierto la extraordinaria evolución del Planeta, desde la bola de fuego de hace 5.000 millones
de años al globo verdeazulado de hoy,
transformado dramáticamente por el crecimiento y desarrollo de la Vida
intraplanetaria.
Al cubrir la Tierra la Vida creó
la Biosfera : Hoy, con el Hombre (Conciencia Humana) cubriendo al Planeta,
aparece la Noósfera.
Y también ha descubierto y demostrado no sólo la esencial
unidad vivencial de todos los seres humanos entre sí (La Humanidad) sino también
su profunda interrelación, interdependencia y estrecha interacción física,
biológica, síquica, etc., con todo lo viviente; más aún, su indisoluble unidad
existencial con todo lo existente en el Planeta.
(¿ ¡¡Y en el Universo ¡!?).
Gracias a esta misma Ciencia, el
Hombre ha logrado el poder para destruir por completo a la Tierra, pero también
con este mismo poder puede participar activamente en el desarrollo de esta Evolución
Planetaria para convertir al Planeta en el hábitat privilegiado de toda la gran
Familia Humana.
En base a estas evidencias, importantes científicos
modernos plantean creíble y fundamentadamente la Hipótesis de GAIA :
“El Planeta Tierra
es un Ser Vivo que crece y se desarrolla a su ritmo y medida y donde la Especie
Humana, su vanguardia evolutiva, juega hoy un rol planetario trascendental.”
La Ciencia está demostrando hoy
la universalidad de la Vida, tal vez presente desde siempre en todo el Cosmos.
Esta hermosa Hipótesis terráquea de Gea o Gaia que
concibe a la Tierra como una Semilla cósmica en pleno proceso de crecimiento y
desarrollo, históricamente, de distintas maneras, ha sido enunciada por
diversos pueblos aborígenes y pueblos
orientales, en general.
Conclusiones
Esta científica Cosmovisión existencial humano-planetaria
puede hoy jugar un rol de primerísima importancia para darle al Hombre Moderno
certeros y sólidos argumentos y profundas convicciones para definir y
“construir” un significado existencial propio, encontrar su sentido de vida
personal como participante activo en la “construcción” del futuro de la
Humanidad y del Planeta.
Si la Tierra avanza hacia una maduración
planetaria, es posible suponer una finalidad para el Hombre y la Humanidad,
incluso para el Universo entero.
Suponer una finalidad para el Ser Humano y la Humanidad
favorece el enfrentar y superar los múltiples y cruciales desafíos actuales que
vive el Hombre moderno, tanto personales como sociales y planetarios y valorar
significativamente su vida actual y su aporte al Otro y a la Humanidad.
Y para fortalecer y profundizar esta tan optimista,
conveniente y razonable mirada de Futuro, vale la pena considerar que al
interior de toda semilla que crece, nada parece perderse, desaparecer o morir,
sino mas bien transformarse y aumentar : Concebir a la Tierra como Semilla
Cósmica fortalecería la atávica y
universal creencia humana en una eventual vida postmortem, dándole más
sentido, significado y valor a la vida presente.
Y desde una perspectiva más optimista aún, ¿ no podría
estar esta Vida planetaria en Evolución brindando siempre un eventual apoyo, a
su forma y a su manera, a todas y a cada una de sus “creaturas” y así estaría
también garantizando el éxito de la
cósmica Tarea del Hombre ?.
{ ¡¡ ¿ ”Mito”? cristiano de la
Divina Providencia ¡!.}
Un mínimo de sano optimismo parece esencial para
aspirar al éxito en toda tarea humana.
No cabe duda que través de esta Cosmovisión Terráquea todo
Individuo podrá reconocer diáfanamente su indisoluble unidad vivencial,
existencial, no sólo con el Otro, y a
través de éste con toda la Humanidad, sino también su unidad con todo su
Entorno y con todo el Planeta; podrá reconocer con claridad la expresión y
defensa en este siglo XXI de los auténticos valores y principios humanistas, comunitaristas,
socialistas, ecológicos y podrá mantener permanentemente una actitud de profundo respeto por la Vida en todas sus
formas y manifestaciones y de gran
compromiso con su Medioambiente y con el desarrollo sustentable del Planeta.
En definitiva, el Hombre Moderno podrá “construirse”, para luego internalizar en su
Siquis, una óptima Teoría Existencial
Personal que favorezca su crecimiento y desarrollo como Persona y la entrega de
su mejor y mayor aporte a su Comunidad.
Con esta mirada es también posible apreciar la
importancia, trascendencia y dignidad del Trabajo (Servicio, Aporte al Otro),
sagrada actividad a través de la cual el
Hombre, fundamentalmente en equipo, participa activa y protagónicamente como
“cocreador” del Planeta.
La Humanidad es un gran equipo planetario que “construye” al Planeta
Tierra aunque hoy mas bien parece estar “destruyéndolo”.
Esta visión humano-planetaria permite también reconocer y aceptar el Deber
(esencial para el Trabajo en equipo) y comprometerse a su siempre fiel
cumplimiento.
Este enfoque, además, pide y justifica una fuerte exigencia
de profundo Respeto por el Otro, reconociendo su gran valor y dignidad como co-constructor
planetario, y promueve la legitimidad y necesidad de la práctica constante de
la Fraternidad al mostrar el origen común y la indisoluble unidad existencial de todos los
hombres entre sí.
La práctica de la Fraternidad y
el reconocimiento de cierta mínima dignidad del Otro, parecen muy importantes
para construir el Amor en su Siquis (Humanización máxima del Animal Humano) : La
conocida y milenaria obligación cristiana de “Amar al Próximo” plenamente se legitima y justifica por la dignidad divina que
le otorga el cristiano a todo Ser Humano.
El Socialismo
Desde esta perspectiva existencial humano-planetaria, no
cabe duda alguna que “construir” el
Socialismo en esta Sociedad resulta absolutamente congruente, coherente y
consistente con el óptimo porvenir que se sueña para la Humanidad y con la
natural evolución humano-planetaria, pues el Socialismo es la condición
político-social connatural de la Especie Humana; condición genética hoy
pervertida y desnaturalizada por el deshumanizador Neoliberalismo.
Se entiende como Socialismo, en
este contexto, a la “construcción” de una Sociedad justa, fraterna y solidaria,
respetuosa de los derechos de todo Ser Humano y profundamente comprometida con
su Medioambiente.
Qis¿¿¿
intrnl
El respeto y defensa de la Vida debe constituirse en el
parámetro ético y moral básico, primario, de este Socialismo siglo XXI y su
“construcción” exigirá, a todos y a cada uno,
una gran dosis de Fraternidad.
Una Cosmovisión de esta naturaleza, humanizadora,
ecológica y comunitarista, racional y razonable, optimista y “constructiva”, podrá ser reconocida fácilmente como
“creíble, confiable, viable” por el Hombre Moderno, y podría ser hoy fácil y
rápidamente incorporada al Inconsciente Colectivo de la Sociedad haciendo uso
de la tecnología y los medios comunicacionales modernos y, desde allí,
producirá el cambio de mentalidad social, la Revolución Cultural que se
necesita para la “construcción” del Socialismo.
Todo avanza
hacia el Bien, afirmó Platón hace 2.500años….
Un
Hombre de la calle
No hay comentarios:
Publicar un comentario